Después, uno de los policías le cogió del brazo para que no bajara a la calzada y el presunto autor le tiró una botella que tenía en la mano y se echó encima tratando de agredirlo.
Los daños que presentaba un coche estacionado en Palma fue el detonante para una violenta agresión en el cuello con una botella rota de un individuo a un joven, al que estuvo a punto de degollar.